Nada va cambiar...

Todo comienza en la noche… en cada noche… en la cama… todo comienza en miradas… que se pierden entre sábanas, mientras nada, se vacía… mientras palabras callan… mientras yo despierto entre pesadillas y no hay nada… mientras me resisto, a pesar de toda esta rutina… las noches se convierten en mi tranquilidad o en mi otra vida… salgo y sé a dónde voy… entro y sé de donde vengo… mañana sabré lo que tengo que hacer… y toda esta semana será igual… sabes perfectamente que la rutina mata… que te mueres y no haces nada… y que la no rutina te hace vivir en la incertidumbre… el equilibrio es complicado… y yo pierdo muy pronto los ánimos… que no me importa perder algo más, que hace poco he adquirido… que no me importa, al despertar ,mirar hacia un lado, y encontrar vacío… que los suspiros nunca llegan a su destino… que todo esto se convierte en algo aburrido… y que a veces debes asumir que tienes que seguir tu camino… que siempre hay desvíos pero que, el tuyo es aquel dónde ninguno va contigo… donde nadie te espera al final del mismo… que piensas que alguien podría ayudarte a olvidar lo que sabes que no olvidas… que piensas que no tienes tiempo para pedir disculpas cuando aún esperas algunas… que piensas que después de tanto tiempo yo no quiero ser normal… que escribir, mi insomnio y mi mentalidad no van a cambiar… que pastillas no van a dormir mi cabeza, y que no soy tan tonta como para no darme cuenta que algo va mal… que es demasiado tarde para disculpas… que nada va a cambiar ya… que mejor seguir y hacer algo, que hablar y no hacer nada… que nunca podrás tener todos los sentidos de una situación… y normalmente tu interpretación estará incompleta, al igual que la de los demás… que nunca tendrás una versión tan completa hasta el final… que decir lo siento es muy fácil, y eso no significa que algo vaya a cambiar… que es muy fácil decir que voy a cambiar y mentir… que año tras año seguiré igual… y que… no voy a cambiar… aún al final, todo siga igual, aún no pueda más conmigo… aún mi cabeza vaya a explotar… ¿qué más da?... si nada va cambiar.

"Hay que esperar que la tormenta amaine sin desesperarse"